(Madrid, 1844-1904)
Ángel Gorostizaga nació en Madrid el 11 de abril de 1844. Tras licenciarse en Derecho en 1866, ingresó en el Cuerpo Facultativo de Bibliotecarios, Archiveros y Anticuarios, por Real Orden de 28 de junio de 1867. Trabajó en el Museo Arqueológico Nacional, adonde fue destinado en 1868, permaneciendo allí durante toda su carrera profesional como responsable de la Sección de Etnografía. Además ejerció como Secretario General del Museo desde el 1 de diciembre de 1869 durante más de veinte años.Salto de línea Como responsable de la Sección de Etnografía hizo recepción de numerosas donaciones que documentó y catalogó, destacando el Códice Maya descubierto en España, entre 1860-1870, en dos fragmentos. La parte mayor pertenecía a Juan de Tro y Ortolano, de Madrid, y la menor a José Ignacio Miró, quien la adquirió en Extremadura y le dio el nombre de Códice Cortesiano en memoria de Hernán Cortés. Al ser estudiados ambos fragmentos se comprobó que formaban parte de un mismo documento que hoy se conserva en el Museo de América de Madrid.Salto de línea Con grandes dotes como catalogador, fue encargado por el Ministerio de Instrucción Pública de redactar las primeras “Instrucciones para la formación de los Catálogos de los Museos Arqueológicos”. Fue autor de numerosas publicaciones científicas y divulgativas, destacando su artículo sobre el Tesoro de los Quimbayas, un conjunto de piezas de oro y tumbagas, verdadera obra maestra del arte pre-hispánico, que el Gobierno colombiano donó a la Reina Regente Doña Cristina, con motivo de la Exposición Hispano-Americana de 1892, y que actualmente se conserva en el Museo de América.
Sin duda, el mayor hito de su carrera tuvo lugar en 1880, durante una comisión de investigación en el Archivo de Indias, fue protagonista del hallazgo de unos manuscritos inéditos del Obispo de Trujillo Baltasar Martínez Compañón, gracias a lo cual pudo salir a la luz un valiosísimo documento de nueve tomos de láminas, acuarelas y planos que se conserva en la Biblioteca del Palacio Real de Madrid. También halló el documento e inventario del envío, por parte de dicho obispo en 1790, de un conjunto de valiosas cerámicas de cultura chimú del norte del Perú al Gabinete de Historia Natural fundado por Carlos III y que hoy se conservan en el Museo de América. Tras una carrera profesional en el Museo Arqueológico Nacional falleció con 60 años en 1904
Ana Zabía